Los buitres prestamistas internacionales vuelan sobre los países débiles de la Unión Europea. Primero le tocó a Grecia hipotecar su soberanía, “aceptando” un préstamo por más de 12.000 millones de euros. Grecia es ahora un país profundamente endeudado, cuyos ciudadanos, afectados por las medidas de austeridad, se manifiestan cada día delante del Parlamento para protestar por los recortes. No me parece que los griegos estén bien informados de la gravedad de su situación. Grecia no sólo tuvo que aceptar el préstamo impuesto, sino que de por sí ha pedido a la Unión Europea otro préstamo de 60 a 80.000.000 de Euros. La UE ha contestado que los bancos europeos podrían prestar ese dinero (otra hipoteca para el país) sólo si quisiesen, es decir, voluntariamente. Pero no hay mucha inclinación en la banca europea por prestar dinero a los helenos. El Banco Central Europeo no lo aconseja y dentro de la misma UE hay desunión al respecto.
Irlanda fue también “rescatada” por los tiburones del dinero. Hace unos días le tocó a Portugal. Los buitres crediticios siguen volando sobre nuestras cabezas. Sus ojos, que todo lo ven, escudriñan a España por si ven una grieta, que justifique el rescate, que se presenta cada vez más difícil debido al volumen de la Economía española, mayor que la de Grecia, Irlanda y Portugal juntos. Hasta ahora, Alemania apoya a España, resaltando que Zapatero ha hecho sus labores. Pero para la Unión Europea, las reformas introducidas por Zapatero no son suficientes. Zapatero tendrá que dar otra vuelta a la rosca.
Para quien no se haya enterado aún, estamos a un metro del borde del abismo. Hay que andar pisando con mucho cuidado. Un descuido, un error… y nos rescatan, es decir, nos hipotecan el país. ¿Pero qué reformas (recortes) pueden hacerse aún? El pueblo está tan cerca de la cólera como el griego. ¿Quién nos salvará? ¿Rajoy? Quien lo crea, merece el Premio Nobel de la Ingenuidad. Pero en cualquier caso, para el PSOE la situación es más desfavorable que para el PP. El PSOE como partido socialista tiene mucho más que perder en sus bases y en su clientela que los conservadores.
Irlanda fue también “rescatada” por los tiburones del dinero. Hace unos días le tocó a Portugal. Los buitres crediticios siguen volando sobre nuestras cabezas. Sus ojos, que todo lo ven, escudriñan a España por si ven una grieta, que justifique el rescate, que se presenta cada vez más difícil debido al volumen de la Economía española, mayor que la de Grecia, Irlanda y Portugal juntos. Hasta ahora, Alemania apoya a España, resaltando que Zapatero ha hecho sus labores. Pero para la Unión Europea, las reformas introducidas por Zapatero no son suficientes. Zapatero tendrá que dar otra vuelta a la rosca.
Para quien no se haya enterado aún, estamos a un metro del borde del abismo. Hay que andar pisando con mucho cuidado. Un descuido, un error… y nos rescatan, es decir, nos hipotecan el país. ¿Pero qué reformas (recortes) pueden hacerse aún? El pueblo está tan cerca de la cólera como el griego. ¿Quién nos salvará? ¿Rajoy? Quien lo crea, merece el Premio Nobel de la Ingenuidad. Pero en cualquier caso, para el PSOE la situación es más desfavorable que para el PP. El PSOE como partido socialista tiene mucho más que perder en sus bases y en su clientela que los conservadores.
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