El verano es la estación del año en la que más fraudes se registran. Los delincuentes parece que agudizan todavía más su ingenio para apropiarse del dinero de los demás y poder seguir viviendo sin dar un palo al agua.
La policía advertía hace poco de un nuevo timo que se va dando con bastante frecuencia: el de los pisos vacacionales inexistentes anunciados en Internet. Lo que demuestra que también la picaresca española se ha puesto técnicamente al día y ha encontrado su hueco en la Red.
Las viviendas vacacionales que se ofertan con fotos trucadas, pretenden estar ubicadas en lugares turísticos muy atractivos. También su precio suele ser muy ajustado para que pique el mayor número de víctimas posible.
El supuesto propietario, o la persona que actúa como intermediaria, pide entonces una cantidad por adelantado para reservar el apartamento en cuestión. En el caso de que el posible inquilino desee ver el apartamento, la contestación es que no es posible enseñarlo porque el propietario reside en algún lugar remoto de la geografía española o, incluso, en el extranjero. Al mismo tiempo, el embaucador propone como forma de pago la entrega de una cierta cantidad de dinero a una falsa empresa de mensajería contra entrega de las llaves del piso vacacional (por supuesto, tanto la dirección del inmueble como las llaves son más falsas que Judas). Otra posibilidad es que le sugieran al incauto el ingreso del dinero en una cuenta bancaria, aunque aquí los estafadores suelen andarse con mayor cuidado porque dejan un rastro y es más fácil para la policía identificarles.
Precisamente anteayer, la Asociación de Consumidores FACUA publicaba un comunicado alertando sobre esos intentos de estafa y aconsejando “verificar que el arrendador es el dueño del piso a través de los registros de la propiedad, aunque si se envía dinero debe garantizarse que el destinatario es el auténtico propietario para evitar casos de suplantación de identidad”.
Así que, ya lo saben, ándense con los ojos bien abiertos a la hora de contratar su futura residencia de vacaciones por Internet.
Margarita Rey
La policía advertía hace poco de un nuevo timo que se va dando con bastante frecuencia: el de los pisos vacacionales inexistentes anunciados en Internet. Lo que demuestra que también la picaresca española se ha puesto técnicamente al día y ha encontrado su hueco en la Red.
Las viviendas vacacionales que se ofertan con fotos trucadas, pretenden estar ubicadas en lugares turísticos muy atractivos. También su precio suele ser muy ajustado para que pique el mayor número de víctimas posible.
El supuesto propietario, o la persona que actúa como intermediaria, pide entonces una cantidad por adelantado para reservar el apartamento en cuestión. En el caso de que el posible inquilino desee ver el apartamento, la contestación es que no es posible enseñarlo porque el propietario reside en algún lugar remoto de la geografía española o, incluso, en el extranjero. Al mismo tiempo, el embaucador propone como forma de pago la entrega de una cierta cantidad de dinero a una falsa empresa de mensajería contra entrega de las llaves del piso vacacional (por supuesto, tanto la dirección del inmueble como las llaves son más falsas que Judas). Otra posibilidad es que le sugieran al incauto el ingreso del dinero en una cuenta bancaria, aunque aquí los estafadores suelen andarse con mayor cuidado porque dejan un rastro y es más fácil para la policía identificarles.
Precisamente anteayer, la Asociación de Consumidores FACUA publicaba un comunicado alertando sobre esos intentos de estafa y aconsejando “verificar que el arrendador es el dueño del piso a través de los registros de la propiedad, aunque si se envía dinero debe garantizarse que el destinatario es el auténtico propietario para evitar casos de suplantación de identidad”.
Así que, ya lo saben, ándense con los ojos bien abiertos a la hora de contratar su futura residencia de vacaciones por Internet.
Margarita Rey
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