Cuidado con hacer pipí en su jardín porque las cámaras de Google le pueden estar acechando. Esto es lo que le sucedió a un francés vecino de la histórica y pintoresca ciudad de Angers, en el departamento de Maine y Loira. El hombre se encontraba podando las plantas cuando sintió la imperiosa necesidad de aligerar su vejiga. Y lo hizo detrás de un frondoso arbusto, al abrigo de miradas indiscretas. O eso es al menos lo que él creía.
Lo cierto es que un vecino le advirtió que, gracias a Google Street View, su foto haciendo pis se había podido ver en internet. El francés montó en cólera y no se lo pensó dos veces. Al día siguiente su abogado presentaba una demanda contra Google en la que reclamaba 10.000 euros de indemnización contra Google Francia por considerar que Google Street View le había convertido en el hazmereir de su ciudad.
La semana pasada el Juez instructor dictó un auto de no ha lugar a la reclamación, ya que, según él, en todo caso, el demandado hubiese tenido que ser la central de Google en los Estados Unidos y no Google Francia. Con lo cual el pobre hombre tendrá además que correr con los gastos de su abogado y del contrario que se elevan a 1.200 euros. Eso sí, Google Francia tuvo que retirar inmediatamente de internet la comprometedora fotografía que había sido tomada con una cámara rotatoria montada sobre una furgoneta. Una técnica que Google utiliza para la toma de las superdetalladas fotos panorámicas (Street View) que se pueden ver en los mapas y callejeros que publica en Internet.
M.R.
Lo cierto es que un vecino le advirtió que, gracias a Google Street View, su foto haciendo pis se había podido ver en internet. El francés montó en cólera y no se lo pensó dos veces. Al día siguiente su abogado presentaba una demanda contra Google en la que reclamaba 10.000 euros de indemnización contra Google Francia por considerar que Google Street View le había convertido en el hazmereir de su ciudad.
La semana pasada el Juez instructor dictó un auto de no ha lugar a la reclamación, ya que, según él, en todo caso, el demandado hubiese tenido que ser la central de Google en los Estados Unidos y no Google Francia. Con lo cual el pobre hombre tendrá además que correr con los gastos de su abogado y del contrario que se elevan a 1.200 euros. Eso sí, Google Francia tuvo que retirar inmediatamente de internet la comprometedora fotografía que había sido tomada con una cámara rotatoria montada sobre una furgoneta. Una técnica que Google utiliza para la toma de las superdetalladas fotos panorámicas (Street View) que se pueden ver en los mapas y callejeros que publica en Internet.
M.R.
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