martes, 25 de mayo de 2010

La mosca

Se acaba de posar una mosca en la pantalla de mi ordenador. Debe de sentirse cómoda pues ha empezado a asearse: con las patas delanteras se lava concienzudamente la cabeza, el cuello y la cara. Me parece una buena ocasión para que recordemos algunos dichos con “mosca”.

“Estar mosca” = Sospechar.

“Tener la mosca detrás de la oreja” = Sospechar, intuir.

“Mosqueo” = (Antes): sospecha. (Hoy): enfado, cabreo

“Mosquearse” = (Antes): empezar a sospechar. (Hoy): empezar a enfadarse, a cabrearse.

“(Escribir) patas de mosca = Escribir con letra muy menuda e ilegible.

“Mosquita muerta” = aparentemente ingenua, que no ha roto un plato.

“No oírse ni el vuelo de una mosca” = Un silencio absoluto.

“Moscón” = Admirador, pretendiente molesto de una chica. Se llama así porque “revolotea” como un pelmazo en torno a la chica.

“En boca cerrada no entran moscas” = Hay ocasiones en las que callar es lo más ventajoso, lo más oportuno.

“(Ponerse) pesado como una mosca. = Molesto, insoportable.

“Mosca cojonera” = (Que pica a los caballos, y al ganado en general, en los genitales): persona totalmente insoportable.

“¿Qué mosca te ha picado? = ¿Por qué estás tan raro, a? ¿Qué te ha pasado? ¿Por qué te pones así?

"Átame esa mosca por el rabo" = pedir algo imposible

Entretanto, mi mosca ha acabado su aseo y ha salido volando. ¡O, prodigio! En contra de la costumbre de estos insectos, que acostumbran a entrar en las casas y no se van aunque estén todas las ventanas abiertas, mi mosca ha salido como un rayo por el balcón.

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