En un mitin, Mariano Rajoy dijo que Castilla-La Mancha, gobernada por María Dolores de Cospedal, será el modelo de la política del PP en el gobierno. Habrá que estar muy atentos a lo que hace de Cospedal para saber a ciencia cierta lo que nos espera con Rajoy como presidente del Gobierno.
En la autonomía madrileña, su presidenta. Esperanza Aguirre, ha adelantado por la derecha a de Cospedal y la ha emprendido con dos sectores de la vida pública, que son intocables: la educación y la seguridad social (que también están en vilo en las autonomías regidas por el PP). Las manifestaciones de protesta de enseñantes y alumnos (estudiantes) por los recortes en educación son un preocupante indicativo de las verdaderas intenciones del demagogo y populista PP si llega a ocupar el poder. Los recortes serán para las capas menos favorecidas, mientras se observará un exquisito cuidado con los ricos y empresarios.
Es comprensible que el pueblo esté indignado (¿qué pueblo no lo está en la actual Europa comunitaria?), pero los electores españoles deberían pensárselo al menos tres veces antes de encomendar el gobierno de la Nación. Existen otras opciones. A los que voten al PP y luego se quejen podrá decírseles: “Reclamaciones al huerto”.
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