Hoy a las 23.30 horas cerrará sus puertas, que desde el 18 de septiembre habrán cruzado aproximadamente 7 millones de visitantes, la macrofiesta de la cerveza, “Oktoberfest”, que todos los años por las mismas fechas se celebra en la capital de Baviera, Múnich. Pero no hace falta irse a Alemania para pasárselo en grande. A partir del 6 y hasta el 16 de octubre tendrá lugar por vigésimo cuarta vez el Oktoberfest de Calpe (Alicante) que, desde su inicio, organiza el CCC (Carneval Club Calpe). Lo que en 1982 empezó como una iniciativa de un grupo de alemanes residentes o con segundo domicilio en Calpe, con el paso de los años, se ha convertido en la fiesta de la cerveza más importante de España y eso, a pesar de las múltiples imitaciones que en los últimos tiempos han proliferado como los champiñones a lo largo y ancho de nuestra geografía.
Entretanto, es el propio alcalde de Calpe quien, picando el primer barril de cerveza, inaugura el evento. El Municipio también instala la carpa de más de 15.000 metros cuadrados para alojar a los numerosos visitantes (se habla de 30.000) que todos los años se acercan para celebrar esta fiesta de la cerveza cada vez más arraigada en toda la población. Una fiesta, en la que no sólo participan ciudadanos alemanes, sino infinidad de españoles de toda la provincia que se acercan a esta bonita localidad alicantina para disfrutar de los típicos manjares (codillo asado y hervido, salchichas y ensaladillas variadas, chucrút) y la exquisita cerveza que aquí saben servir como nadie. Para pasárselo bien está, además, el variado programa de atracciones y actividades para todos los gustos y edades (actuaciones de grupos de folklore bávaro, de música para recordar y de jazz) que, con absoluta dedicación y mimo, han elaborado los miembros organizadores del CCC.
Pero la razón por la que me he decidido a hacer especial hincapié en la celebración es que, precisamente este año, le reina de la fiesta es una española, la bella calpina de 24 años Alba Valero. Es la tercera vez en los 24 años de historia de este festejo que una española es elegida para ocupar el codiciado trono.
Desde aquí, nuestros mejores deseos y un “Prosit” (salud) a todos aquellos que, con su trabajo, han hecho posible que el Oktoberfest de Calpe se convierta en un punto de referencia más allá de la Costa Blanca.
Margarita Rey
Entretanto, es el propio alcalde de Calpe quien, picando el primer barril de cerveza, inaugura el evento. El Municipio también instala la carpa de más de 15.000 metros cuadrados para alojar a los numerosos visitantes (se habla de 30.000) que todos los años se acercan para celebrar esta fiesta de la cerveza cada vez más arraigada en toda la población. Una fiesta, en la que no sólo participan ciudadanos alemanes, sino infinidad de españoles de toda la provincia que se acercan a esta bonita localidad alicantina para disfrutar de los típicos manjares (codillo asado y hervido, salchichas y ensaladillas variadas, chucrút) y la exquisita cerveza que aquí saben servir como nadie. Para pasárselo bien está, además, el variado programa de atracciones y actividades para todos los gustos y edades (actuaciones de grupos de folklore bávaro, de música para recordar y de jazz) que, con absoluta dedicación y mimo, han elaborado los miembros organizadores del CCC.
Pero la razón por la que me he decidido a hacer especial hincapié en la celebración es que, precisamente este año, le reina de la fiesta es una española, la bella calpina de 24 años Alba Valero. Es la tercera vez en los 24 años de historia de este festejo que una española es elegida para ocupar el codiciado trono.
Desde aquí, nuestros mejores deseos y un “Prosit” (salud) a todos aquellos que, con su trabajo, han hecho posible que el Oktoberfest de Calpe se convierta en un punto de referencia más allá de la Costa Blanca.
Margarita Rey
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