La derechona ya ha iniciado los preparativos para la toma de la codiciada corporación estatal Radio Nacional de España, y sobre todo, Televisión Española 1, 2 y 24h.
Desde la derecha, la prensa ya dispara sus primeros tiros contra la radio y televisión públicas, que califica de voceros del PSOE, a pesar de que durante el gobierno de Zapatero, para evitar manipulaciones, se acordó nombrar al director general por mayoría absoluta en el Congreso.
El director elegido, Oliart, dimitió, hace unos meses. Además, es preciso renovar el consejo de administración, que ya ha superado su legislatura cuatro veces. Una conjunción muy favorable al PP, que ahora se descuelga con el anuncio de que el director general será nombrado por mayoría simple, lo cual significa que el PP, con vocación de partido único, reinará también en el ente estatal. Los que falazmente echan en cara al PSOE haber manejado a su antojo a RTVE, tendrán ahora el poder absoluto en la corporación.
“¡España, una, España grande, España libre, etc..!” Muchos de ustedes, que no han perdido la memoria histórica, recordarán esas consignas emitidas, paradójicamente, por Radio Nacional de España, al final de lo “diarios hablados” del régimen franquista. Entre las muchas anécdotas de la transición figura que se haya mantenido Radio Nacional de España como designación de la otrora radio fascista, que fue un regalo del siniestro Göbbels, ministro nazi de propaganda, a los sublevados “nacionales”. El no cambiar el nombre de Radio Nacional de España fue otra concesión más de la débil oposición democrática a los vencedores.
Pero en especial, la 1, la 2 y 24h emiten programas de alta calidad debidos a un excelente equipo, lo que le ha valido ganar incluso reconocidos premios internacionales por la profesionalidad de sus corresponsales y la altura de los informativos, totalmente imparciales. Cuando se ostenta el gobierno, éste genera más información que la oposición. También lo deben de saber en Génova, sede madrileña del PP, y también lo saben los francotiradores extremoderechistas, que ya han abierto el fuego en un ataque de acoso y derribo contra el ente.
Más pronto que tarde, si el PP consigue que se nombre por sencilla mayoría al director de la corporación radiotelevisiva, los ciudadanos que no comulgamos con ruedas de molino tendremos que informarnos en las privadas. RTVE tiene un déficit de unos 50 millones. El PP tendrá tal vez que ordenar que vuelva a emitirse publicidad. Si gran parte de la considerable actual audiencia de TVE (en ocasiones hasta seis millones de televidentes) se marcha a otras televisiones (como la 3, la 4, la 5 o la 6), la televisión pública perderá atractivo para los anunciantes, que no son precisamente, las hermanitas de la caridad.
Desde la derecha, la prensa ya dispara sus primeros tiros contra la radio y televisión públicas, que califica de voceros del PSOE, a pesar de que durante el gobierno de Zapatero, para evitar manipulaciones, se acordó nombrar al director general por mayoría absoluta en el Congreso.
El director elegido, Oliart, dimitió, hace unos meses. Además, es preciso renovar el consejo de administración, que ya ha superado su legislatura cuatro veces. Una conjunción muy favorable al PP, que ahora se descuelga con el anuncio de que el director general será nombrado por mayoría simple, lo cual significa que el PP, con vocación de partido único, reinará también en el ente estatal. Los que falazmente echan en cara al PSOE haber manejado a su antojo a RTVE, tendrán ahora el poder absoluto en la corporación.
“¡España, una, España grande, España libre, etc..!” Muchos de ustedes, que no han perdido la memoria histórica, recordarán esas consignas emitidas, paradójicamente, por Radio Nacional de España, al final de lo “diarios hablados” del régimen franquista. Entre las muchas anécdotas de la transición figura que se haya mantenido Radio Nacional de España como designación de la otrora radio fascista, que fue un regalo del siniestro Göbbels, ministro nazi de propaganda, a los sublevados “nacionales”. El no cambiar el nombre de Radio Nacional de España fue otra concesión más de la débil oposición democrática a los vencedores.
Pero en especial, la 1, la 2 y 24h emiten programas de alta calidad debidos a un excelente equipo, lo que le ha valido ganar incluso reconocidos premios internacionales por la profesionalidad de sus corresponsales y la altura de los informativos, totalmente imparciales. Cuando se ostenta el gobierno, éste genera más información que la oposición. También lo deben de saber en Génova, sede madrileña del PP, y también lo saben los francotiradores extremoderechistas, que ya han abierto el fuego en un ataque de acoso y derribo contra el ente.
Más pronto que tarde, si el PP consigue que se nombre por sencilla mayoría al director de la corporación radiotelevisiva, los ciudadanos que no comulgamos con ruedas de molino tendremos que informarnos en las privadas. RTVE tiene un déficit de unos 50 millones. El PP tendrá tal vez que ordenar que vuelva a emitirse publicidad. Si gran parte de la considerable actual audiencia de TVE (en ocasiones hasta seis millones de televidentes) se marcha a otras televisiones (como la 3, la 4, la 5 o la 6), la televisión pública perderá atractivo para los anunciantes, que no son precisamente, las hermanitas de la caridad.
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