viernes, 28 de septiembre de 2012

Curiosidades: La culpable no era la gorda


Mayra Rosales, fue acusada de matar al hijo de su hermana al sentarse sobre él, y asfixiarlo. Sin embargo su sobrepeso fue la prueba contundente de su inocencia: su condición física le impedía moverse. La autopsia reveló que el niño murió de un golpe en la cabeza, mismo que según investigaciones le propinó su propia madre, a la que Mayra decidió encubrir.

Mayra Rosales, una mujer de 31 años, y su marido Bernie se habían mudado a vivir con su hermana, Jaime y sus cuatro hijos a Sullivan City. Generalmente, Mayra cuidaba de los pequeños. Un día, uno de los niños sufrió un accidente y fue trasladado al hospital. Mayra confesó haberse caído encima de él y que su peso (casi 500 kg) lo asfixió. Por ello, fue acusada de asesinato.

Sin embargo, después de los resultados de la autopsia, el juez quedó convencido que era imposible que las palabras de Mayra fueran verdad. Su abogado se dio cuenta de que Mayra estaba encubriendo a alguien. Meses después, Mayra confesó lo sucedido. Quería encubrir a su hermana que había golpeado varias veces a su hijo con un cepillo del pelo ese mismo día.

“La gente no puede entenderlo pero yo quería ayudar a mi hermana y no quería que las autoridades se llevaran a los otros niños”, dice Mayra. “Le dije a los investigadores que me di la vuelta en mi cama y caí sobre él para dar a entender que sólo se trataba de un accidente”.

“Jaime estaba dando a mi sobrino su desayuno y él no quería comer. Empezó a llorar y ella se enfadó y le golpeó en los brazos, las piernas y la cabeza. Después, ella cogió la manta de Eliseo, lo cubrió y lo puso a dormir. Luego salió, dejándome con los niños” cuenta Mayra.

Más tarde, Eliseo comenzó a sufrir problemas respiratorios y Mayra llamó a una ambulancia y se llevaron al nene a un hospital. Desde allí, su hermano Jaime llamó a Mayra y, entre sollozos, le contó que la policía no le permitía ver a Elíseo si no les refería las causas que llevaron a  la hospitalización de su hijo. Jaime rogó a Mayra que dijera a las autoridades que ella era responsable de las lesiones. Mayra no pensó en las consecuencias y aceptó.

Finalmente, su hermana fue encarcelada y ahora Mayra está en tratamiento para perder peso. “Estoy muy triste de que mi hermana esté en la cárcel, pero creo que mi hermana entiende ahora que sus acciones eran malas. Creo que puede cambiar y aprender de lo sucedido” afirma Mayra.

M.R.
Fuente: Tele5 (Telecinco.es)
Planetacurioso.com

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