Leído en la Prensa: "Filesita"

Todo empezó el pasado sábado en el programa La Sexta Noche. Pablo Iglesias estaba invitado para presentar y tratar de explicar el contenido del libro de Jacobo Rivero “Conversación con Pablo Iglesias”, en el que el periodista  (aprovechando el tirón mediático de Iglesias) publica una conversación mantenida con el líder de "Podemos" tras las elecciones europeas del 25 de mayo. Entre otras controvertidas tesis, el recién elegido eurodiputado se declara partidario de establecer mecanismos de control público para regular a los medios de comunicación.  Un tema que ya estaba en boca de todos nada más aparecer el opúsculo y del se habían hecho eco todos los medios de comunicación, sobre todo los más conservadores. 

Me quedé de piedra cuando, en el curso de la discusión, Eduardo Inda, director adjunto del diario El Mundo, acusó en repetidas ocasiones a Pablo Iglesias, haciendo caso omiso de las advertencias del moderador Iñaki López, de “tener su propia filesita” (en clara alusión al caso de corrupción y financiación ilegal “Filesa”, que hizo tambalear hace dos décadas los cimientos del PSOE).

Y ahí dio comienzo un rifirrafe dialéctico que ya se veía que iba a acabar mal, especialmente  porque Inda no se apeó del burro y siguió en sus trece, llegando incluso al insulto personal. Así pues no me extrañó nada enterarme ayer por los informativos de la tele de la noticia que van a leer a continuación, ampliada por la Cadena SER:

 

“Pablo Iglesias, líder de Podemos, ha anunciado que ha conseguido en tres horas la financiación necesaria para iniciar una demanda contra Esperanza Aguirre, presidenta del PP de Madrid, y a Eduardo Inda, periodista del diario 'El Mundo'. Según Iglesias, lo hace por haberle relacionado con ETA y haberle acusado de recibir dinero del régimen chavista de Venezuela.

A través de un comunicado, Podemos explicó que el primer paso en estas acciones legales contra Aguirre e Inda "es la presentación de una demanda de conciliación, por la que se ofrece la rectificación pública de las acusaciones vertidas. Si no fuese aceptada, las acciones proseguirían su curso por la vía correspondiente".

Según la nueva formación, "tanto el periodista como la presidenta del PP de Madrid acusaron a Pablo Iglesias de estar con ETA o apoyar a ETA, así como de recibir dinero de un gobierno extranjero", en concreto unos 3,7 millones de euros que, supuestamente, habría recibido una fundación afín al líder de Podemos.

En este sentido, esta fuerza política explica que también son objeto de su denuncia las declaraciones de Inda en las que este informador se refería a que "Podemos tiene su propia 'Filesita'", en referencia al dinero que habría recibido de Venezuela. El periodista también sostuvo "que 'limpios, limpios' no está ningún Partido, ni siquiera Podemos, salvando curiosamente a UPyD y Ciudadanos". Según el partido que lidera Iglesias, las afirmaciones tanto de Aguirre como de Inda "se han hecho de forma repetida y con la máxima publicidad". "Tanto es así", añade la formación de izquierdas, "que las palabras de Esperanza Aguirre se encuentren colgadas en la página de inicio del PP de Madrid, bajo el nombre 'Lo que hay que saber de Podemos', además de en su propio blog".

Fuente: Cadena SER

No es que yo tenga una especial predilección por Pablo Iglesias, al contrario. Creo que se le está dando un protagonismo, especialmente en la televisión, que no se merecen los votos obtenidos (1.200.000) en las últimas elecciones europeas, si no fuese porque significan un clarísimo toque de atención de los votantes hacia los dos grandes partidos, con el fin de que den un giro radical al rumbo de su política y escuchen las quejas y necesidades de una ciudadanía cada vez más descontenta. Esto también incluye a doña Espe, no precisamente un modelo de virtudes y que, después de su último incidente con la Policía Municipal, con fuga incluida, calladita estaría más guapa. Pero no soy la única en creer que, con tal de salir en la prensa, la condesa consorte de Bornos y de Murillo, sería incluso capaz de acusar a Iglesias de haber matado a Manolete.

 

Pero lo que, desde luego, no es de recibo es que algunos medios, por mucha manía que le tengan a Pablo Iglesias, se permitan insultos y descalificaciones que entran en el campo de la agresión verbal. Si están en desacuerdo con los líderes de “Podemos”, basta con que publiquen los documentos que demuestran todas las acusaciones vertidas sobre ellos , siempre que éstos sean auténticos y no se trate de burdas falsificaciones.

Debería existir un código ético eficaz que prohibiese a los periodistas publicar o expresar opiniones que golpeen al adversario político por debajo de la línea de la cintura (en España, el código deontológico europeo de la profesión periodística se aplica, a todas luces,  de forma muy laxa). Sólo si se debate limpiamente, con argumentos válidos, se podrán evitar espectáculos televisivos tan poco edificantes como el que vimos el pasado sábado en La Sexta Noche y que han llevado a Pablo Iglesias y “Podemos” –que a estas horas se estarán frotando las manos por la publicidad gratuita– a ocupar, una vez más, las portadas de los periódicos.

M.R.