viernes, 3 de octubre de 2014

Leído en la Prensa: Las "tarjetas fantasma"





Cuando me enteré de la noticia me entraron ganas de vomitar. ¿Qué hemos hecho los ciudadanos de este país para merecer a esos delincuentes que se han enriquecido a nuestra costa gracias a su cercanía al poder que les ha colocado a dedo en los cargos que tan malamente han gestionado?

Mi primera intención fue la de dejar de ser políticamente correcta y, aunque sólo fuese para desahogarme, escribir de inmediato un comentario en Facebook para cubrir a esos pájaros de improperios. Luego me lo pensé mejor pues, al fin y al cabo, mi círculo de “amigos” en esa red social es bastante reducido, de manera que el eco de mi pataleta hubiese sido casi nulo.

Así que me decidí por publicar en el blog algún artículo que describiese, sin ningún tipo de comentario, con exactitud y objetivamente este escandalazo, que es una gota más que, de seguir a este ritmo, más pronto que tarde hará derramar el vaso de la increíble paciencia de los españoles. Y fue en la edición digital de ABC donde encontré lo que andaba buscando. El artículo titulado “Así gastaron los directivos de Caja Madrid los 15 millones: ropa, restaurantes, viajes y efectivo”, que pueden leer a continuación, reza:

“Tres millones de euros en restaurantes, dos en disposiciones de efectivo, 1,5 en desplazamientos y viajes, otro millón en grandes superficies comerciales, 800.000 euros en hoteles, 700.000 en ropa y complementos... Y así hasta 15,25 millones en diez años. Es lo que se gastaron con tarjetas de crédito de la entidad 86 directivos de la cúpula de Caja Madrid (65 miembros del consejo de administración y de la comisión de control y 21 consejeros ejecutivos y directivos) entre 2002 y 2012. 

El caso está ya en manos del juez de la Audiencia Nacional Fernando Andreu, que en los próximos días deberá decidir si, como pide la Fiscalía Anticorrupción, acumula esta investigación a la de Bankia, abierta en julio de 2012. El Ministerio Público quiere que sean los peritos del Banco de España designados en la instrucción del caso Bankia los que aclaren también estas presuntas irregularidades. 

Andreu se encuentra con el trabajo prácticamente hecho: según confirmaron a ABC fuentes de la investigación, el FROB llevaba tres meses empleado a fondo en destapar el mal uso de estos fondos hasta que lo trasladó a Anticorrupción. Y ha sido la Fiscalía la que, ante su aparente carácter delictivo (presunto delito societario y apropiación indebida), ha decidido ponerlos en conocimiento del mismo juez que instruye el caso Bankia. 

Para fines privados
En el escrito remitido a la Audiencia, los fiscales solicitan al juez que analice «la existencia de unas tarjetas de crédito proporcionadas por Caja Madrid inicialmente, y después por Bankia, a algunos de sus consejeros y directivos, fuera del circuito normal de otorgamiento de tarjetas de empresa, que habrían sido utilizadas en algunos casos para fines no vinculados con la actividad de la entidad». 

Esas tarjetas fueron creadas en 2002 con Ildefonso Sánchez-Barcoj como exdirector general y, según Anticorrupción, «fuera del circuito ordinario». Es precisamente Sánchez-Barcoj el que más dinero gastó en esa década: 484.000 euros. Le siguen el exconsejero de Izquierda Unida José Antonio Moral Santín, con 456.500 euros; el exdirector de organización y medios Ricardo Morado, con 448.300 euros, y el expresidente Miguel Blesa, con 436.700 euros.

De los 15,2 millones gastados, casi nueve correspondieron a miembros del consejo y de la comisión de control, y el resto fue empleado por consejeros ejecutivos y directivos de la caja. Caja Madrid se hizo cargo de la mayor parte, pero el grupo fruto de la fusión de esta entidad con otras seis cajas también tuvo que hacer frente a gastos, en concreto, por valor de 245.200 euros.

Fue la investigación interna encargada por José Ignacio Goirigolzarri a su llegada a Bankia la que detectó la existencia de estas tarjetas. Tras suceder a Rodrigo Rato al frente del grupo, y ante la necesidad de un rescate con ayudas públicas por 22.424 millones de euros, el banquero ordenó a su equipo levantar todas las alfombras en busca de posibles operaciones irregulares. 

En junio de este año, y pese a que el despacho de abogados Herbert Smith, al que consultó, no veía indicios de delito, la dirección de Bankia dio cuenta del caso de las tarjetas al FROB, que a su vez, y tras analizarlo y corroborar la postura de la entidad, trasladó la información a la Fiscalía.

Una vez que la entidad tuvo conocimiento de estos hechos, y con el FROB ya avisado, se reclamó a los titulares de las tarjetas la devolución de cantidades. Hasta el momento en el que el escrito de Fiscalía se registró en la Audiencia Nacional solo habían respondido cuatro personas, con cuyas devoluciones al menos se han recuperado 200.000 euros de los 245.200 que tuvo que asumir Bankia.

Reacción del PSOE
Se trata de Sánchez-Barcoj, el expresidente Rato, el exadjunto a la presidencia José Manuel Fernández Norniella y el exdirector general Matías Amat. Todas las cantidades devueltas se refieren a la etapa de Bankia: ni Sánchez Barcoj, ni Amat, ni Norniella ni Rato han respondido por lo gastado en la etapa de Caja Madrid. Rato, por ejemplo, aún adeuda 44.200 euros.

Quien ha decidido tomar cartas en el asunto es el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez. Este partido abrirá expediente informativo a los exconsejeros a propuesta socialista Antonio Romero, Ramón Espinar, Ignacio Varela y José Acosta, según anunciaron a ABC fuentes socialistas, informa Gabriel Sanz. Sánchez, según esas fuentes, va a ser «inflexible» con la corrupción y ha ordenado a la comisión de ética y garantías del PSOE que abra un expediente para averiguar si hicieron un uso indebido de esas tarjetas. Si así se demuestra, la dirección del partido «pedirá la devolución del dinero y se les retirará el carné del partido».

Bankia delega en la Fundación de la caja recuperar lo no devuelto
BFA-Bankia ha recuperado 200.000 euros en gastos con tarjetas «opacas», lo que reintegraron Rato, Norniella, Barcoj y Amat al ser reclamados por la actual dirección de Bankia. El banco, asesorado por Herbert Smith, solicitó los importes generados en la etapa Bankia, después de la fusión de las cajas, de 2011 a 2012.

El informe jurídico de esa firma de abogados, según ha podido saber ABC, concluye que los gastos de 2002 a 2011 deben ser reclamados por Caja Madrid, convertida en fundación y cuya presidenta es Carmen Cafranga, que gastó con su tarjeta 175.200 euros.

«Bankia», dice el informe, «no está estrictamente legitimada» al no ser su balance el que soportaba esos gastos, sino los de la caja, pero la fundación podría alegar que su negocio fue traspasado a Bankia. Preguntada sobre si reclamará, la fundación dice que está «realizando actuaciones de comprobación y hasta que no se finalicen no se tomará una decisión al respecto».

Fuente: ABC
Autores: M. Veloso / N. Villanueva 

Entretanto, UpyD pedirá hoy la imputación de los 86 consejeros del PP, PSOE, IU y de los sindicatos que utilizaron las “tarjetas fantasma”. Yo, además, desearía que esos mangantes de cuello blanco fuesen condenados por todas sus tropelías a penas de cárcel y a devolver hasta el último céntimo ese dinero que se han llevado por la patilla. Aunque me huelo que no me caerá esa breva.

M.R. 



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