Algo había oído, pero nunca creí que la realidad fuese tan cruda. Me refiero a la situación más que precaria en la que se encuentra el catedrático emérito de Sociología, Amando de Miguel.
Según comentó él mismo con motivo de la presentación de su nuevo libro “El cambio que viene” en el espacio La Noche en 24 Horas, de Miguel reconoció en el curso de la entrevista que tiene que vender su extraordinaria biblioteca de 13.000 volúmenes por motivos económicos.
Sin dar muchos detalles, que yo he ido recopilando con paciencia navegando en internet, el prestigioso y ultraconservador sociólogo hizo hincapié en el gran valor económico e intelectual de su colección de libros que incluye obras de sociología, filosofía, economía, historia, religión, derecho y ciencias políticas. Al parecer, Amando de Miguel invirtió en ella varios millones de euros. Ahora estaría dispuesto a deshacerse de ella por 300.000. Desgraciadamente, hasta el momento ninguno de los que se han interesado por su vasta biblioteca (al parecer, la más importante de España en su género) no le han hecho ninguna oferta que valiese la pena ser tomada en consideración.
Mis pesquisas han dado como resultado que el autor de 122 libros se encuentra casi en la indigencia debido a una casa “por encima de sus posibilidades” que se mandó construir hace unos 15 años en las cercanías de Madrid, en la exclusiva zona de Collado Villalba, valorada en 2 millones de eurosy por la que contrajo una hipoteca con el banco que ahora no alcanza a pagar con su jubilación de escasos 2.000 euros al mes y alguna que otra intervención como tertuliano en la televisión, por la que suele cobrar honorarios que rondan los 100 euros por programa.
La pensión que le tiene que pasar a su ex mujer, el IBI (2.700 euros anuales), la ayuda a su hijo en paro y los demás gastos corrientes, entre ellos el bonometro, se tragan todo su presupuesto y, a menudo, no podría ni comer sino fuese por las invitaciones de sus amigos. Sin embargo, el motivo principal que le ha llevado a poner en venta su bien más preciado es poder así saldar la deuda hipotecaria antes de que el Banco le embargue su suntuosa casa y le desahucie por impago. Si bien don Amando ha reconocido en algunas entrevistas haber vivido por encima de sus posibilidades, asegura que la mayor parte del dinero “se lo gastó en libros”.
Con el coche aparcado en el garaje porque no tiene dinero para gasolina, Amando de Miguel, a sus 77 años, afronta el día a día sin apenas utilizar la calefacción y duchándose con agua fría.
Conociendo por experiencia lo rácanos que son los editores a la hora de fijar los honorarios de los autores y lo mal que se venden los libros en nuestro país, dudo mucho que la nueva obra de este sociólogo (al parecer tiene varios libros ya escritos que nadie tiene interés en publicar) “El cambio que viene” le vaya a sacar de pobre.
Margarita Rey
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